Insomnes

 

Salen sigilosamente de las habitaciones de sus hijos. Despertó sobresaltada creyendo haber oído el llanto de uno de los niños. Pero no. Es tarde y duermen tranquilos. Con una sonrisa cansada su marido le coge la mano y la acompaña de nuevo hasta la cama. La tranquiliza con dulzura hasta que se queda dormida y sólo entonces vuelve sobre sus pasos, entra de nuevo en la habitación de unos niños, sus hijos, que crecieron hace años y ya no están. Y, en ese momento, solo y desamparado en mitad de la noche, impotente ante el más cruel y caprichoso ladrón de recuerdos, se rompe silenciosamente.

 

 

 

Microrrelato para el concurso «Relatos en Cadena» del programa La Ventana de la Cadena Ser.

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