
Yo soy la libertad herida por los hombres
Con ocasión del día mundial del teatro, RTVE recupera la grabación que hace unos meses realizó de «Mariana Pineda» en el Teatro Español de Madrid. Una versión del drama de Lorca a cargo de Javier Hernández-Simón, muy fiel al texto original, centrada por completo en la temprana muerte de la heroína.
Emblema liberal contra el absolutismo de la llamada «Década Ominosa», acusada de rebeldía contra Fernando VII y condenada a garrote vil por bordar una bandera con las palabras «ley, igualdad y libertad», Mariana Pineda es un personaje de leyenda con una historia mucho más compleja y algo distinta de la que Lorca aborda en su obra.
El poeta centra su historia en los supuestos amores de Mariana con Pedro de Sotomayor para dar vida a una mujer movida por los sentimientos y la pasión; una joven viuda inmersa, a causa de ese amor, en una intriga política que la conducirá a la muerte, capaz de asumir con dignidad las consecuencias de sus actos, de no traicionar a los suyos por salvarse (pese a saberse abandonada por todos), valiente hasta el último suspiro, empeñada en dejar una imagen honorable en el recuerdo de sus hijos.
Laia Marull da voz así, en esta versión, al miedo, al desgarro, a la soledad y al abandono de un personaje mítico, enfrentado a sus inseguridades y desesperanzas, en un montaje muy original, sobre un escenario prácticamente vacío, ocupado solo por unas puertas que, según el momento, se juntan o separan, sirviendo de marco para ciertas entradas o salidas y haciéndose eco de temores o pesadillas y que, junto a las cintas rojas que sugieren el telar donde Mariana borda la bandera, dan a la escenografía un tono muy simbólico y algo opresivo.
Bellísimo texto de Lorca, lírico y repleto de poesía, amargo y desgarrado a la vez, adaptado para una función magnífica que muestra las aristas de una mujer leal, íntegra y coherente consigo misma hasta las últimas consecuencias.